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Proteger adecuadamente las vías respiratorias en ambientes con mucho polvo, gases o virus es importantísimo. Por eso, la utilización de mascarillas respiratorias es obligatorio en hospitales y en la mayoría de sectores industriales.
La elección de un modelo depende de muchos factores. Debido a esto, en este post te explicaremos cuáles son los principales aspectos que debes tener en cuenta a la hora de elegir una mascarilla respiratoria adecuada para uso profesional, y para protección particular.
Como hemos comentado, las mascarillas de protección deben usarse en lugares donde los trabajadores están expuestos a sustancias peligrosas. Asimismo, otro de los puntos focales para el uso de esta protección para las vías respiratorias son los hospitales cuando se trata a enfermos con enfermedades contagiosas. Una manera de evitar que se produzca cualquier contagio y se propague. Ya que este tipo de problemática es común que se extienda si no se toman medidas adecuadas.
El aspecto más importante a la hora de elegir una mascarilla respiratoria es su nivel de protección, ya que es un indicativo de la cantidad de aire que van a filtrar. Existen tres niveles de protección: el FFP1, FFP2 y el FFP3, siendo este último el que más eficacia de filtración ofrece llegando hasta el 98%, mientras que la FFP1 solo llega hasta el 80%.
La elección del nivel de protección de la mascarilla respiratoria depende del ambiente en el que te vayas a encontrar. Por ejemplo, si vas a trabajar en ambientes con poca cantidad de polvo, puedes emplear las FFP1 sin problema. Mientras que para la protección ante agentes infecciosos como virus la OMS recomienda las FFP3. Este último grupo son las opciones más adecuadas de mascarilla antivirus.
Al contrario de lo que pueda parecer, que una mascarilla tenga válvula no garantiza una mayor protección frente a los agentes externos, sino que simplemente sirve para ofrecerte una mayor comodidad. Esto se debe a que ayuda a reducir la condensación de humedad en el interior, facilita la respiración y, en caso de que uses gafas, evita que se te empañen los cristales.
A la hora de elegir una mascarilla de protección es importante saber que el filtro que incorporan pierde eficacia con el uso, ya que se satura y el nivel de protección que ofrece se reduce. Por eso, es importante que después de utilizarlas una vez te deshagas de ellas.
Aunque la mayoría de mascarillas son de un solo uso, existen modelos que se pueden reutilizar, por lo que si vas a emplearlas de forma continuada te aconsejamos que utilices estos modelos.
Una vez que hayas elegido la mascarilla de protección adecuada debes ajustarla correctamente para impedir que pueda entrar aire sin filtrar por alguna apertura. Para evitar que pueda ocurrir esto debes:
Aunque parezca que las mascarillas quirúrgicas ofrecen una excelente protección ante virus o agentes externos que se encuentren en el aire, sucede lo contrario. Este tipo de mascarillas están diseñadas para que el filtro actúe sobre el aire de dentro de la mascarilla, no sobre el exterior. Por eso, se emplean en operaciones o para atender a pacientes con inmunodeficiencia.